¿Nunca has pensado en dar un gran salto?

Olvidar todo, absolutamente todo, y empezar de cero. Cero es ese exacto momento en el que no recuerdas nada de lo anterior, sinceramente, crees que no cometerías otra vez los mismos errores? Puede que escogieras otros caminos, puede que no, pero serías siempre la persona que fuiste antes de desear empezar en la nada.
También sería necesario decir todo lo que perderías, que por supuesto no es poco; esos momentos de tensión máxima, o de increíble relajamiento, aquellos otros en los que llorarías el diluvio de Noé, u otros  en los que necesitarías nuestro universo entero para expresar lo feliz que estás, están los momentos en los que necesitas un abrazo, y la persona indicada te abraza por la espalda, esos en los que una sonrisa te alegra el día, y un simple abrazo te mantiene con plena felicidad toda la semana. Perderías también el calor del primer beso, incluso todos esos amores que creías verdaderos, tanto la inconsciencia con la que te entregas a un primer amor, como la tristeza con la que te despides de él.
Sinceramente, esas no son ni la mitad de razones que existen para que no decidas empezar de cero por un simple error, los errores ocurren, y por mucho que lo intentes, no conseguirás evitarlos, la vida es para mirarla por encima de cualquier imperfección, disfrutar cada día, y recordar momentos. La vida está para enamorarte, y para desenamorarte, para que tus amigos te ayuden en cualquier cosa, para conocer gente, para que esa gente se convierta en amigos y esos amigos se queden para siempre a tu lado, también para que otros se separen de ti, para llorar, para reír, para disfrutar, para cometer errores, para solucionarlos..
Acaso en algún momento,¿ alguien te ha dicho, que la vida está para que  en el mismo momento de equivocarte, decidir que se borre todo ? No, ¿la razón? nunca disfrutarías suficiente de la vida.